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Por los cambios en la alimentación, cada vez más alejada de la famosa dieta mediterránea; por los cambios en los hábitos de vida, cada vez con menos tiempo y más preocupaciones o simplemente por problemas fisiológicos a la hora de hacer la digestión, cada vez son más comunes los pacientes que acuden a la farmacia por problemas intestinales.
Los problemas digestivos son muy diversos, se puede sufrir reflujo gastroesofágico, hinchazón abdominal, gases, estreñimiento o diarreas entre otros. El aparato digestivo es muy amplio y además de poder sufrir diferentes patologías, las causas que las provocan pueden ser diversas y afectar a diferentes zonas. Por eso, además de conocer los síntomas y tratarlos para mejorar nuestro estado, hay que conocer el origen del problema para actuar directamente sobre lo que está provocando el daño.
La intolerancia a los alimentos es provocada por la incapacidad del aparato digestivo de digerir algún tipo de alimento o alguno de sus componentes. No hay que confundirla con las alergias a algunos alimentos en las que interviene el sistema inmunitario. En las intolerancias el problema está provocado por una mala digestión que puede provocar diarreas, gases o dolor abdominal. Esto son problemas típicos de las personas con intolerancia a la lactosa, junto a la intolerancia al gluten, una de las más comunes. La intolerancia a la lactosa es debida a un déficit en el nivel de lactasa, la enzima que procesa la lactosa en azúcares simples y que facilita su asimilación por el intestino. Para evitar los síntomas se recomienda la toma de lactasa antes de la ingesta de lácteos.
En el proceso de digestión influye lo que comemos y como lo comemos. La digestión comienza en la boca y es fundamental masticar bien los alimentos antes de tragar, esto evita las molestias y facilita la acción de los jugos gástricos en el estómago. El consumo adecuado de agua es necesario para una correcta digestión, junto a los alimentos ricos en fibra como las frutas o las verduras. Por otro lado, hay alimentos que cuesta más digerir y que sufren digestiones más pesadas como los fritos, el huevo, las carnes rojas o a leche. El café, el té o las bebidas carbonatadas pueden también irritar el estómago y provocar molestias intestinales.
La flora intestinal son los microorganismos que viven en nuestro intestino y que nos benefician. Una flora intestinal sana protege al organismo frente a virus y bacterias patógenas y ayuda a mantener unas digestiones adecuadas. La flora bacteriana se puede ver alterada por malos hábitos como el alcohol o el tabaco, por el estrés, por la toma de medicamentos como los antibióticos o por una alimentación poco equilibrada. Una vez la flora está dañada se modifica el proceso de digestión y es común la aparición de estreñimiento o diarreas, de gases y de dolor abdominal. La toma de probióticos es importante para mantener una microbiota estable y sana y evitar las molestias intestinales.
En nuestra farmacia puedes encontrar productos para facilitar tus digestiones y evitar las molestias asociadas a una mala digestión y siempre con el mejor consejo.
Ns Lactoben 50 Comprimidos con Dispensador 3,75g, contiene la lactasa que en personas con intolerancia a la lactosa se encuentra disminuida en su aparato digestivo. Su uso está indicado cuando se vaya a consumir algún lácteo justo antes de empezar a comerlo. La dosis indicada es de 1 o 2 comprimidos según la necesidad de cada uno y si después de 30 o 45 minutos se siguen consumiendo lácteos se recomienda volver a tomar, sin superar los 12 comprimidos diarios.
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Aquilea Digestivo 30 Comprimidos Masticables, un complemento alimenticio para evitar las molestias intestinales asociadas a una mala digestión. La combinación de papaya, hinojo y enzimas digestivas como la proteasa, la lactasa y la amilasa es fundamental para digerir correctamente los alimentos y evitar los gases y la sensación de hinchazón abdominal. Se recomienda la toma de dos comprimidos después de la comida.
Profaes4 Adultos 25mm 30 Cápsulas, una combinación de probióticos y prebióticos formulado para mantener el equilibrio de la microbiota. Contiene cuatro cepas distintas de probióticos en las proporciones más adecuadas y fructooligosacáridos como prebióticos para potenciar el efecto de los probióticos. Se recomienda la toma de 2 cápsulas al día, después de tomar alimentos y no contiene ni gluten ni lactosa.
